En el artículo de hoy hablamos de la diferencia entre Escisión y pensamiento dicotómico, dos términos que a menudo se confunden. Para ello, primero vamos a definir cada uno de ellos.
Escisión (splitting):
Conducta de moverse en blancos o en negros (en extremos). Se anhelan las certezas y se desean unas bases sólidas para ver el mundo y poder posicionarse. Normalmente ha podido haber una infancia difícil con padres disfuncionales, figuras de autoridad impredecibles y erráticas. Puede haber un estancamiento cognitivo, resulta complicado saber qué es lo bueno y lo malo. Mucho más matizar los grises que hay entre los extremos.
Es una defensa ante la inestabilidad e imprecisión que en un pasado cuando fuimos niños nos confundió. Cuando alguien sufre splitting no consigue unificar sus sentimientos positivos y negativos en un mismo saco, aparece cuando hay ambigüedad. La incertidumbre genera dolor emocional y responde radicalizándose. Les cuesta tener empatía con los demás, les cuesta entenderse a sí mismos y lo proyectan en los demás.
Pensamiento dicotómico:
Forma de pensar en la que solo se contemplan dos alternativas opuestas y excluyentes entre sí. Pensar en todo o en nada. Es una forma de pensar habitual pero no por ello lógico. En muy pocas ocasiones solo hay dos opciones y tan radicales. Es una forma de ver la realidad que tiene una distorsión, que puede ocurrir con mayor o menor frecuencia. Normalmente los sujetos que tienden a tener esta forma de ver el mundo suelen ser autoritarios. Tienen una visión categórica y es lo que da forma ese pensamiento dicotómico. Es una forma de simplificar mucho la realidad, se puede caer en sesgos al usar menos recursos y razonar de forma más sencilla.
El padre de la terapia cognitiva A. Beck decía que: «era una forma de razonar inmadura y primitiva, y sujetos con problemas para identificar dimensiones de la realidad que están considerando. Serán además personas que se mantendrán firmes pues les cuesta replantearse sus afirmaciones. Pueden ser personas narcisistas pero con una autoestima baja, necesidad de tener el control, búsqueda de perfeccionismo y baja tolerancia a las situaciones ambiguas. Son radicales en su pensamiento y rechazan opciones contrarias a las suyas. Puede afectar a su estado anímico, frustración al no poder imponer lo que piensa».
Conclusiones
Como ya hemos visto el significado de ambos conceptos podemos considerar que ambos conceptos vienen a ser lo mismo. Mecanismos de defensa que se activan para poder situar lo bueno de lo malo, lo placentero de lo displacentero, lo defensivo de lo ofensivo, entre otras cosas. El objetivo sería saber identificar y poder defenderse del peligro, aunque se considera una distorsión cognitiva que tiende a ver la realidad en extremos y no en un continuo.
Bibliografía
- Beck, J. (2008). Terapia cognitiva: Conceptos básicos y profundización. Editorial Gedisa.
- Beck, A. T., Rush, A. J., Shaw, B. F., & Emery, G. (1983). Terapia cognitiva de la depresión. Desclée de Brouwer.
- Riso, W. (2009). Terapia cognitiva. Barcelona, España, Editorial Paidós Ibérica. ∙ Safran, J. D., & Segal, Z. V. (1994). El proceso interpersonal en la terapia cognitiva. Barcelona: Paidós.