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¿QUÉ ES UN ATAQUE DE PANICO?

Según el APA (Asociación American de Psicología) describe los ataques de pánico como un repentino miedo abrumador, surge de un estado de alerta, sin haber ninguna razón aparente.

Cuando la persona lo padece por primera vez, le es difícil identificarlo como un ataque de ansiedad o de pánico. Lo primero que percibe son los síntomas fisiológicos por su intensidad, por ello, muchas persona creen que les está padeciendo un ataque al corazón, debido a las abrumadoras y desagradables que son las sensaciones somáticas que experimentan en ese momento.

 

Síntomas o manifestaciones de un ataque de ansiedad o ataque de pánico.

Las características principales de una crisis de angustia o ataque de pánico son la aparición de miedo o malestar de carácter intenso, que se acompaña, al menos, de cuatro de los siguientes síntomas somáticos o cognitivos:

  • Sacudidas del corazón o elevación de la frecuencia cardiaca. Palpitaciones.
  • Opresión o malestar torácico.
  • Náuseas o malestar abdominal.
  • Sudoración.
  • Sensación de frio o calor excesivo.
  • Temblores o sacudidas.
  • Sensación de falta de aire, ahogo.
  • Mareo o sensación de inestabilidad o desmayo.
  • Parestesias (sensación de entumecimiento u hormigueo).
  • Despersonalización (sentirse separado de uno mismo).
  • Desrealización (sensación de irrealidad o extrañeza).
  • Miedo a perder el control o volverse loco.
  • Miedo a morir.

La aparición puede ser repentinita o acumulativa. Su duración suele ser de 20 a 30 minutos, aunque se tiene una sensación subjetiva de una duración interminable.

 

¿POR QUÉ SE PRODUCE UN ATAQUE DE PANICO?

Los ataques de pánico son considerados la antesala del trastorno de pánico, dentro de la clasificación de los trastornos de ansiedad, que afecta al 1 de cada 75 personas,  según la APA.

Su inicio puede ser temprano, se manifiestan durante la adolescencia y la adultez temprana. Relacionan su desarrollo con episodios de vida cargados de alto estrés o acontecimientos vitales traumáticos y una predisposición genética.  Pero es importante señalar que cualquier persona puede llegar a experimentar, ocasionalmente, un ataque de pánico.

A nivel clínico, se observa que las personas que han sufrido un ataque de pánico, manifiestan un miedo persistente a volverlo a sufrir en el futuro, lo que denominamos ansiedad anticipatoria o preocupación exacerbada por un posible acontecimiento que todavía no ha ocurrido. Si suele ser frecuente, que los ataques de pánico se repitan, por lo que es necesario trabajara a nivel terapéutico para poder manejarlo mejor.

Las personas que padecen trastorno limite de la personalidad, manifiestan haber sufrido ataque de pánico, en un alto porcentaje. Teniendo en cuenta que son personas altamente sensibles y vulnerables, y a veces también, con sucesos vitales traumáticos y   con un alto grado de ansiedad, no es infrecuente que en la clínica presenten

 

¿QUÉ HACER CUANDO SE PRODUCE UN ATAQUE DE PANICO?

En un primer momento hay que disminuir la sensación somática abrumadora. Para ello vamos a utilizar dos estrategias, la primera tiene que ver con distraer a la mente, poner la atención fuera del foco de angustia. Y la segunda calmar las sensaciones desagradables mejorando el control de la respiración.

  1. Calmar la mente poniendo la atención fuera. Visualizar.

Vamos a utilizar una imagen conocida y cotidiana para nosotros, un lugar seguro. También podemos aprovechas una canción que nos calme o nos guste, o recordar nuestra comida favorita. Lo importante es que sea fácil de atraer a la mente y que nos aporte seguridad y distracción. Sitio favorito y tu canción favorita, cualquier estimulo que sea agradable para ti. De esta manera desviamos la atención del cerebro, focalizando en estímulos positivos.

  1. Respiración profunda.

Es importante cambiar el ritmo de activación y de agitación fisiológica y la respiración nos ayuda a ello, podemos mejorar nuestro control fisiológico a través de ella.

Vamos a utilizar tres fases en esta tecnical. Inhalación, Retención y Exhalación.

Toma aire por la nariz unos segundos, sin esfuerzo, luego expulsa el aire en los mismos segundos . Te puedes ayudar contando mentalmente.

Inhala, toma aire, cuenta mentalmente hasta cinco. Reten, cuenta mentalmente hasta cinco y Exhala contando otra vez hasta cinco.

Repite varias veces el ejercicio y tu ritmo cardíaco desacelera, de esta manera aumenta la sensación de control y se puede ir entrando en los estados de calma

 

Estas pautas son para el momento de crisis, pero recuerda que detrás ataque de pánico hay una angustia y un estrés, y unas vivencias que hay que trabajar con un profesional de la salud mental.

 

CONSECUENCIAS DE UN ATAQUE DE PANICO. QUÉ HACER DESPUES.

Una de las consecuencias mas frecuentes, tras haber sufrido un ataque de pánico, es el miedo anticipatorio a volver a experimentar otra vez una situación parecida.

Trabajar el miedo es fundamental, al igual que los estresores que las personas padecen en esos momentos y los acontecimientos vitales traumáticos. Por todo ello es necesario un trabajo mas profundo, en un espacio terapéutico, con un profesional experto. Con ello también se facilitará las herramientas necesarias para manejar la situación y aumentara el conocimiento personal, evitando el aislamiento social que se puede dar cuando se ha padecido un ataque de pánico por miedo a salir.