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salud mental

Conclusión sobre la ponencia de Fernando Sánchez

Por Eventos

Fernando Sánchez, coordinador de psicólogos de AMAI TLP, presentó la concreción de un esfuerzo encauzado durante años por parte de la asociación, como es el Primer estudio sociológico sobre el trastorno límite de la personalidad en España, realizado por la Fundación AMAI TLP.

El estudio surge, ante la detección por parte de la Fundación, de la falta de datos oficiales y actualizados (por parte del Ministerio de Sanidad, Consumo y Bienestar Social, de los Observatorios de Salud Mental, así como de las propias Unidades Especializadas en el tratamiento del TLP en distintos Complejos Hospitalarios) que dificultan dimensionar cuantitativamente la incidencia y gravedad de este trastorno. Así como definir la intuición clínica, observada desde la Fundación AMAI TLP, de la proliferación exponencial de este trastorno, especialmente desde edades progresivamente más tempranas. 

Conocer todos los aspectos de esta patología, resulta necesario a la hora de progresar en abrir nuevas vías de investigación. Así como formar a profesionales especializados y rediseñar recursos especializados y eficientes que se ajusten a las necesidades singulares de este tipo de pacientes.

Siendo conscientes de la dificultad de realizar una investigación sociológica es compleja por la falta de datos oficiales. Finalmente, se decidió comenzar el estudio con una fase de recopilación de datos sobre este Trastorno en fuentes secundarias a través de la técnica del Desk Research.

Con el único objetivo de amplificar la mirada comprensiva sobre la situación actual del trastorno límite en la actualidad en España. El estudio parte de una recogida de datos general sobre salud mental, acercando sobre los trastornos de personalidad. Y finalmente centrando su mirada exclusivamente en el trastorno límite de la personalidad.

Ante una recomendación encarecida al lector, de que acuda directamente al texto del estudio sociológico, por su detalle y concreción formal sobre estos tres aspectos citados, el estudio adquiere valor. No sólo por ser el primer esfuerzo, sino por las conclusiones tan amplias que pueden entenderse como un punto de partida para seguir avanzando en un estudio sociológico completo sobre el TLP por medio de otras fases de carácter más cualitativo y cuantitativo.

Entre las conclusiones más significativas que nos muestra el estudio podemos reseñar:

  • Entre el 30% y el 60% de los pacientes diagnosticados con trastornos de personalidad son tlp.
  • Se estima que la prevalencia del tlp oscila entre el 1% y el 2% de la población general, un 1% en adultos y un 3% en adolescentes.
  • La incidencia afecta a las mujeres en mayor proporción que a los hombres, en una proporción 3:1.
  • El momento de máxima expresión clínica se sitúa al inicio de la vida adulta (19-34 años) aunque las primeras manifestaciones  se encuentran en la adolescencia y pre-adolescencia  (14-20 años).
  • Los expertos coinciden que  el bullying a edades tempranas es una de las causas que provocan la aparición del tlp.
  • El paciente con tlp realiza un gran consumo sanitario, ya que representa el 10% de las consultas en centros ambulatorios de salud mental, y entre el 15% y el 20% de los pacientes psiquiátricos ingresados. 
  • Sólo entre el 40%-60% de los afectados con tlp acuden a los servicios sanitarios. Es decir, aproximadamente 5 de cada 10 personas con tlp, están desatendidas y no reciben alta médica.
  • En la actualidad no existe ningún fármaco autorizado en España para el tratamiento del tlp.
  • Más del 90% de pacientes con tlp desarrollan un 50% de recuperación sostenida.
  • La comorbilidad  con otras patologías es un rasgo característico del tlp. Como lo demuestra que entre los afectados el 93% presenta un trastorno afectivo; el 88% de ansiedad; el 64% trastorno por uso de sustancias;  y el 53% trastornos alimenticios.
  • El riesgo de suicidio es 400 veces más alto en afectados con tlp que en la población general.

Con este estudio sociológico, se cimentan las bases para crear un conocimiento estructural del trastorno límite. Que además permita dar seguimiento y conocer más detalladamente las distintas variables implicadas en una patología psiquiátrica tan compleja. Es por tanto, necesario y adecuado agradecer el esfuerzo de la Fundación AMAI-TLP, en contribuir declaradamente en la atención. Y por supuesto, en la mejora de los pacientes con trastorno límite de la personalidad. Su esfuerzo e ilusión siguen intactos a pesar de la complejidad natural que implica esta realidad.

Para volver a ver la ponencia solo tienes que acceder a nuestra web.

Conclusión sobre la ponencia de Dolores Mosquera

Por Eventos

Dolores Mosquera, experta en el abordaje terapéutico del TLP y autora del libro Diamantes en bruto.

Nos habló de una de las mayores dificultades para entender al paciente con TLP. Porque lo que se ve es una serie de conductas y no lo que hay detrás. Conductas como el enfado, los intentos autolíticos, la mimetización, que se explican por una falta de habilidades por desarrollar. Como por ejemplo, la dificultad para pedir ayuda o resolver los problemas. Las cuales habría que trabajar con técnicas como la mentalización, pensamiento reflexivo o establecimiento de límites e identificación de necesidades.

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Conclusión sobre la Ponencia del Dr. Robert O. Friedel

Por Eventos

Para conmemorar el veinte aniversario de la Fundación AMAI-TLP, tuvimos la inmensa suerte de poder contar en estas jornadas con un especialista de relevancia internacional: el Dr. Robert O. Friedel.

 

El Doctor estuvo siempre encantado, y en disposición de colaborar en estas jornadas, al valorar significativamente la labor que realiza la Fundación AMAI-TLP. Y pudo mostrarnos su dilatada experiencia clínica como psiquiatra. y casi o igual de importante, su experiencia cercana al haber sido familiar directo de un paciente con Trastorno Límite de Personalidad.

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Conclusión sobre la ponencia del Dr. Carlos Mur de Viu

Por Eventos

El Doctor Carlos Mur tras reconocer y celebrar su alegría compartida con Amai tlp. Gracias al gran crecimiento de esta organización en los últimos años, no solo a nivel asistencial. Sino también a nivel de diálogo y comunicación con las instituciones públicas. Nos aporta una interesantísima ponencia, relativa a los factores psicosociales importantes en el trastorno límite de la personalidad. Los cuales coexisten con los factores biológicos, tradicionalmente los más estudiados por la medicina.

Los estudios en este campo demuestran que hay factores de mantenimiento. Tanto de salud como de enfermedad, en el trastorno límite de la personalidad.

Si el afectado por este trastorno se caracteriza por una permanente inestabilidad en su propio mundo conductual. Además, puede ocurrir que el entorno social más cercano del afectado se muestre también inestable. O bien, no pueda contener la inestabilidad del paciente.

Con los datos que tenemos relativos al entorno psicosocial de las personas que sufren trastorno límite de la personalidad caben destacar:

  1. Reporte de importante experiencia de abandono en la infancia
  2. Implicación parental alterada sobre todo si es con los dos progenitores y no solo con uno
  3. Abusos en la infancia
  4. Antecedentes psiquiátricos en la familia

Carlos Mur también propone como última línea de estudio en todo este campo, la consideración de factores transculturales. Lo que quiere decir: la estructura concreta de una sociedad es un factor que afecta en los individuos que la componen.

Dentro de estos factores transculturales se pueden señalar:

  1. La  sociedad que pierde su capacidad de reparar los daños que se han producido en el ámbito familiar microsocial.
  2. Curiosamente el aumento de recursos para el trastorno límite de la personalidad favorece que se incremente la población clínica que acude a estos recursos.

Carlos nos deja un motivo para la reflexión, tanto para la sociedad en general como para cada individuo en particular: «Cuando la sociedad, incluidos los profesionales sanitarios, discrimina a las personas más vulnerables de esa sociedad, el desajuste en esos individuos desfavorecidos, seguramente es un lógico resultado».

Recuerda que puedes volver a ver su ponencia en la web.

 

Género

El TLP y Género

Por TLP y la Salud Mental
  • 1. Características de la sociedad posmoderna:

Las sociedad y los individuos crecen y se redefinen a través de cambios estructurales profundos, a modo de producción incesante (Vásquez Rocca, 2011), que se van produciendo simultáneamente en sociedades e individuos colateralmente. Así se paso de la modernidad a la posmodernidad y no pocos autores ya describen un nuevo momento cultural denominado neomodernidad, en formación en estos momentos actuales de incertidumbre.

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testimonio coronavirus

Buscar faros en este mar de incertidumbre por paciente de AMAI

Por Testimonios

Este extraño verano va tocando a su fin. No ha sido fácil acostumbrarse a esta “nueva normalidad” tan extraña que nos ha obligado a replantear nuestra sociedad, nuestra cotidianidad y prioridades; desde el sistema sanitario y educativo, hasta la forma en la que nos cuidamos a nosotros mismos, como acto de responsabilidad global, o el trato que damos a nuestros mayores. Ni siquiera algo tan mundano como un viaje en metro es como antes. 

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Covid

La psicología post Covid-19 y la “nueva normalidad»

Por Fundación AMAI - TLP

Antes de nada, hay que comentar que los profesionales de la psicología se han tenido que subir al online para atender a sus pacientes en el estado de alarma sin pensarlo porque tenían que trabajar en sus terapias.

En el caso de AMAITLP, tanto por el equipo humano de Psicólogos especializados en TLP cómo la junta directiva, secretaría y comunicación. Han hecho posible prestar atención profesional a todos nuestros pacientes durante el estado de alarma y con los horarios de sus terapias. Un trabajo a considerar.

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arcoiris

¿Orgullo y prejuicio?

Por Fundación AMAI - TLP, TLP y la Salud Mental

A propósito de la celebración del Día del Orgullo y el estigma del enfermo mental, en 1813 publica Jane Austen una comedia romántica titulada “Orgullo y Prejuicio”. Esta obra ha tenido innumerables adaptaciones como película, serie o teatro, teniendo hasta la actualidad un enorme éxito. El comienzo de la novela, desde el inicio, anuncia el asunto de fondo que va a contemplarse; comienza así: “Es una verdad mundialmente reconocida que un hombre soltero poseedor de una gran fortuna necesita una esposa”. A partir de esta afirmación, la novela de una manera realista y muy psicológica -como sacando una fotografía de la sociedad de toda una época-  pone de manifiesto todos los perjuicios que podían tener las mujeres de ese entonces, unido al orgullo de una posición social determinada.

Podemos decir que el estigma social contribuye a tener un plan preparado para cada uno, saber qué objetivos se pueden tener (o no) en la vida social. Aprovechando que en esta semana se celebró las fiestas por el Día del Orgullo, de una manera transformada, adaptada a la situación de la pandemia mundial del COVID-19. Queremos felicitar al colectivo y hacer una reflexión sobre el estigma social, autoestigma. Y de qué manera podemos trabajar para que estos procesos  sean socialmente reparados y sanados también en el colectivo que atendemos nosotros de las personas con enfermedad mental.

Efectivamente, la sociedad también realiza un proceso de estigmatización; es decir, de etiquetamiento, con respecto a la enfermedad mental. Lo que genera unas ideas y unas formas de pensar completamente falsas, pero completamente automáticas, que ahorran tiempo a la hora de procesar información. Pretenden ser atajos eficaces para el manejo de la información pero que llevan a cometer tremendos errores de valoración de la realidad. 

En este sentido, respecto a las personas con enfermedad mental, tenemos tres ideas falsas pero que de una manera automática aparecen en la mente de muchos individuos de la sociedad:

  1. El enfermo mental frecuentemente es peligroso y hay que tenerles miedo consecuentemente.
  2. Son espíritus libres y rebeldes; por lo tanto, consecuentemente van a tener una grave y irresponsabilidad en sus cosas.
  3. Tienen percepciones sobre el mundo completamente infantiles por lo que consecuentemente van a necesitar siempre que se les cuide.

Esta es la forma completamente falsa porque las tres afirmaciones se puede demostrar que no remiten a la realidad de los hechos. Simplemente: son mentira. Todavía más negativo que este estigma social es el proceso de auto-estigmatización. Este proceso se da cuando el individuo que pertenece a este colectivo: el de personas con enfermedad mental, se cree él mismo estas ideas relativas a su identidad social. También es grave que incluso dentro del ambiente sanitario, los profesionales sanitarios pueden caer en el error de dar por cierto lo que el estigma propone, sin hacer una labor adulta, científica de análisis de los datos relativos a este colectivo. Nuestra felicitación y reconocimiento al colectivo homosexual que  lleva implícito también una agenda de trabajo para nosotros.

Durante 50 años, se ha realizado una labor constante, dedicada, difícil y arriesgada para luchar contra el estigma social que se otorgaba a este colectivo. En la actualidad, el respeto a los derechos y obligaciones podemos admitirlo como completamente normalizado. Pero no ha caído del cielo, ha sido fruto de un trabajo durante todos estos años. Aunque, una cosa es el reconocimiento social y otra cosa es la vivencia individual de cada individuo perteneciente a la sociedad. A veces hay cierta disparidad, me refiero a que a pesar de la igualdad de derechos y el respeto a este colectivo, siga viendo comportamientos individuales de discriminación en este aspecto pueden incluirse todos los chistes y bromas mal intencionadas. Esto ya es un trabajo de cada individuo cara a una vida social integrada y respetuosa.

Si analizamos la situación en el área del colectivo de personas con enfermedad mental, además de esta dimensión individual, sigue existiendo desgraciadamente esa dimensión comunitaria en la que al enfermo se le etiqueta de una manera falsa inadecuada. Esto lleva al comportamiento consecuente que es la conducta discriminatoria. 

Vamos a recordar las líneas de trabajo que han resultado eficaces para cambiar el estigma social y que el colectivo homosexual ha utilizado durante estos 50 años llegando a un resultado positivo en cuanto a el cambio de dicho estigma:

  1. La protesta. Este es el menos significativo en cuanto a efecto sobre el cambio del estigma, pero siempre es una puesta en escena pública de cuál es el asunto, cuál es la problemática que se está intentando afrontar.
  2. La educación. Disminuye el estigma a base de proporcionar información veraz y equilibrada utilizando distintos medios: libros, videos, programas de enseñanza estructurados para transmitir esa información adecuada.
  3. El contacto. Si la sociedad tiene oportunidad de tener contacto real o personal con el colectivo. Esas personas van a reparar y reorganizar todo su sistema cognitivo de ideas preformadas acerca de ellas. Recuerdo en este sentido el testimonio que me proporcionó una persona de cierta edad. Esta persona de una manera fortuita acabó en el Día de la Salud Mental que se celebró en el Matadero, hace unos años. Y me comunicó que se había quedado tremendamente impresionada por la capacidad que había visto en el colectivo de organizar, de hacer, de relacionarse. Y agradecía a la organización la oportunidad que se le había dado. El día tan bonito que se le había proporcionado por la celebración de este evento.

¡Feliz Orgullo Gay! Esperemos que dentro de un tiempo vosotros podáis celebrar también con nosotros la superación del estigma de la enfermedad mental. 

Quiero saludar desde este lugar también a las personas que iniciaron desde el movimiento asociativo del enfermo mental grave, hace unos pocos años el movimiento del “Orgullo Loco” con una filosofía parecida al orgullo gay. Pero aplicada a la dimensión del enfermo mental.

Como cerrando un círculo, voy a terminar este artículo cerrando lo del comienzo. En su novela, Jane Austen retrata como el orgullo y el prejuicio interfieren en el caminar social de cada individuo.

Amigos, que nuestros orgullos y nuestros prejuicios los tengamos cada vez más conocidos y cada vez más a raya. Para que podamos reconocer en los individuos seres únicos e  irremplazables. A los que hay que tener respeto, a los que hay que querer y querer conocer. Solo así podremos caminar juntos.