El Trastorno Límite de la Personalidad (TLP) es una condición de salud mental que afecta la forma en que una persona percibe y se relaciona con el mundo que la rodea.
Uno de los aspectos menos discutidos de este trastorno es la distorsión del tiempo que muchas personas con TLP experimentan. En este artículo, exploraremos brevemente cómo se manifiesta la distorsión del tiempo en personas que tienen diagnóstico de TLP y qué implicaciones tiene para quienes lo padecen.
La Distorsión del Tiempo en el TLP
Una de las experiencias comunes entre quienes tienen TLP es la distorsión del tiempo. Esto puede manifestarse de varias maneras:
1. Percepción del Tiempo:
Las personas con diagnóstico de TLP a menudo sienten que el tiempo pasa más rápido o más lento de lo normal. Por ejemplo, pueden sentir que un momento de intensa emoción, como por ejemplo un episodio de ansiedad, dura una eternidad, lo que aumenta el sufrimiento percibido, mientras que momentos de calma o emociones positivas pueden parecer efímeros, lo que contribuye a una búsqueda constante de estímulos intensos para volver a experimentar esas sensaciones agradables.
Este «desajuste temporal emocional» también puede manifestarse en la dificultad de las personas con TLP para planificar el futuro o para gestionar la espera, dado que el concepto del tiempo se vuelve borroso. Su experiencia está marcada por el «aquí y ahora» en su forma más intensa, sin poder colocar los eventos emocionales dentro de un marco temporal coherente.
Otro aspecto de la percepción del tiempo es la fragmentación. Durante episodios de estrés intenso o desregulación emocional, las personas pueden experimentar sensaciones de despersonalización o desrealización, donde el tiempo puede parecer que se ralentiza o que se disuelve. Esta desconexión de la realidad puede intensificar las sensaciones de vacío y desesperación, dos de los síntomas emocionales más debilitantes del trastorno.
2. Recuerdos y Nostalgia:
La forma en que las personas con TLP recuerdan eventos pasados puede estar influenciada por sus emociones actuales. Un recuerdo que en un momento puede parecer doloroso puede ser reinterpretado como positivo en otro, lo que afecta su percepción del tiempo transcurrido.
3. Impulsividad y Urgencia:
La impulsividad, un rasgo común en el TLP, puede llevar a una sensación de urgencia. Las personas pueden sentir que deben actuar de inmediato, como si el tiempo se estuviera agotando, lo que puede intensificar la ansiedad y el estrés.
Esta urgencia puede reflejarse en una necesidad inmediata de aliviar el malestar emocional o de recibir una respuesta de sus seres queridos. La falta de control sobre el paso del tiempo se refleja en la dificultad para esperar pacientemente una reacción o una solución. Un ejemplo es cuando una persona con TLP espera una llamada o un mensaje de texto. La espera, que para otros puede durar minutos o horas, para alguien con TLP puede sentirse como una eternidad, exacerbando el miedo al abandono y las respuestas impulsivas.
Implicaciones de la Distorsión del Tiempo
La distorsión del tiempo en personas con TLP puede tener diversas implicaciones que afectan su vida diaria, sus relaciones y su bienestar emocional. A continuación, exploraremos algunas de estas implicaciones en mayor profundidad:
1. Dificultades en la Toma de Decisiones
La percepción distorsionada del tiempo puede llevar a decisiones impulsivas. Cuando una persona siente que el tiempo se está agotando, puede actuar sin pensar en las consecuencias a largo plazo. Esto puede resultar en elecciones que no son las más adecuadas para su bienestar, como involucrarse en relaciones tóxicas o participar en comportamientos autodestructivos.
2. Aumento de la Ansiedad y el Estrés
La sensación de que el tiempo se acelera o se desacelera puede generar una gran ansiedad. Por ejemplo, si una persona siente que el tiempo se está acabando para lograr ciertos objetivos, puede experimentar una presión abrumadora que intensifica su malestar emocional. Esta ansiedad puede convertirse en un ciclo vicioso, donde la preocupación por el tiempo afecta aún más su estado emocional.
3. Impacto en las Relaciones Interpersonales
La distorsión del tiempo puede influir en cómo las personas con TLP perciben y manejan sus relaciones. Pueden sentir que los momentos de conexión emocional son breves y efímeros, lo que puede llevar a un comportamiento de búsqueda de atención o a la necesidad de reafirmación constante. Por otro lado, pueden interpretar mal el tiempo que pasan separados de sus seres queridos, sintiendo que la distancia es más dolorosa de lo que realmente es.
4. Dificultades en la Planificación y la Organización
La percepción distorsionada del tiempo puede dificultar la capacidad de planificar y organizar actividades. Las personas con TLP pueden subestimar el tiempo que necesitan para completar tareas o sobrestimar su capacidad para manejar múltiples responsabilidades. Esto puede llevar a la procrastinación o a la sensación de estar abrumados, lo que a su vez puede afectar su autoestima y su sentido de logro.
5. Alteraciones en la Autoimagen
La forma en que las personas con TLP experimentan el tiempo también puede influir en su autoimagen. Si sienten que no han logrado lo que deberían en un período determinado, pueden experimentar sentimientos de fracaso o insuficiencia.
Abordaje terapéutico
El tratamiento del TLP puede también abordar la percepción del tiempo. Algunas estrategias útiles incluyen:
- Mindfulness: Ayuda a las personas con TLP a anclarse en el presente sin ser abrumados por la urgencia o la ansiedad temporal. La práctica de estar plenamente en el «ahora» puede reducir la intensidad de las emociones en momentos de crisis.
- Técnicas de regulación emocional: Estas técnicas enseñan a las personas a identificar, comprender y regular sus emociones, lo que puede mejorar la forma en que experimentan el paso del tiempo durante períodos de intensa angustia.
- Planificación estructurada: Crear rutinas y estructuras claras puede ayudar a las personas con TLP a sentirse más en control del tiempo, lo que disminuye la percepción de caos en su vida diaria.
Conclusión:
La forma en que las personas con diagnóstico de TLP experimentan el tiempo está influenciada por la inestabilidad emocional, lo que puede hacer que los momentos se sientan eternos o fugaces dependiendo del estado emocional en el que se encuentren. Comprender esta relación entre el TLP y la percepción temporal es esencial para desarrollar intervenciones más efectivas que ayuden a las personas a manejar mejor sus emociones y su experiencia del mundo.
Bibliografía
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